Hoy ha vuelto a ser un día muy duro en el Santuario. Nos despertábamos con la triste noticia del fallecimiento de Masai. No sabemos qué ha pasado, hemos encontrado su cuerpecito sin vida en su cuna. En las tomas de leche de la noche, estaba bien, nada que nos hiciese sospechar este triste final.
Es verdad que era un milagro que estuviese vivo, ya que cuando fuimos a buscarlo estaba tan delicado que casi no sobrevive. Gracias a los cuidados de Ismael López Dobarganes, remontó y los últimos días estaba cada vez mejor. En las exploraciones y pruebas veterinarias no se vio nada anormal, aparte de que era mucho más pequeño de lo normal. Puede ser que no tomara bien el calostro de la madre o que tuviese algún problema de nacimiento que no se apreciaba. Sea lo que sea, ahora ya no está entre nosotros.
Nos queda el consuelo de que no murió en la “granja”, como querían que pasase, ya que no le querían dar ningún tipo de atención. Por los menos durante este tiempo ha sido el ser más querido del mundo y ha estado rodeado de amor.
Ha sido un día muy duro para Ismael López Dobarganes, al que la noticia lo ha pillado en Madrid, donde tenía una firma de su libro “Animales como tú”. Ha hecho de tripas corazón y, ha pesar de su inmensa tristeza, ha cumplido con la tarea. Está inmensamente agradecido de todas las muestras de cariño que ha recibido a lo largo del día de hoy y de todo el amor con que la gente le ha recibido. Ha sido una manera más de honrar la memoria de Masai y de todos los animales que mueren cada día a manos de los humanos.
Masai, nunca te olvidaremos, has sido un rayo de luz y ternura en nuestras vidas y te prometemos que seguiremos luchando por todos vosotros, hasta que la última jaula quede vacía 
