Ayer por la noche Agapito comenzó a encontrase mal, con la “barriga” hinchada, tenía lo que se llama timpanismo, en este caso espumoso. Es algo muy grave que puede ser letal, como desgraciadamente ha sido. A pesar del tratamiento y todos los cuidados, sobre las 4 de la madrugada nos dejaba, su débil cuerpo no aguantó 😢
Cuando llegó al Santuario estaba muy débil, tanto que a los dos días lo tuvimos que llevar de urgencias al veterinario, donde estuvo una semana ingresado. En esta ocasión casi se muere, pero remontó. Desde entonces parecía que iba bien, pero nosotros veíamos que no se desarrollaba como un cordero normal, como en el caso de Dora.
Ya de por sí el timpanismo puede ser mortal, pero aquí creemos que Agapito ya estaba “tocado” de nacimiento, seguramente debido a que no tomo calostro.
Ha sido una noche muy dura. Estamos sin palabras y casi no nos lo creemos. Era el cordero más tierno que hemos conocido, cariñoso y adorable. No es justo que,librándose de su destino en un matadero, haya vivido tan poco en el Santuario.
Nos quedamos con la suerte que ha sido conocerlo y vivir con él, y siempre estará en nuestros corazones ❤️
Hoy la noche es más brillante ❤️
