Hoy tenemos la mala noticia de que Charlie ya no está. Le hemos tenido que ayudar a partir, su situación había empeorado mucho y ya era irreversible.
No sabemos la edad que tenía, ya que apareció en el Santuario hace un tiempo con una herida muy grave en la cabeza. A pesar del recelo inicial, poco a poco se dejó curar y comenzó a confiar en nosotros. Las últimas semanas ha estado hospitalizado en el Santuario, con suero y tratamiento para su insuficiencia renal que, a pesar de tener una leve mejoría al principio, evolucionó de manera fatal en muy poco tiempo.
El tiempo que ha vivido en el Santuario ha sido feliz, cuidado y amado por todos. Siempre nos ha provocado una gran ternura, por el estado tan lamentable en el que llegó y lo cariñoso que se volvió en poco tiempo. Ahora ya está libre de todo sufrimiento y se ha ido rodeado del amor de los que más le querían.
Nunca te olvidaremos, siempre en nuestros corazones