Cleto es un pato que encontraron herido y desorientado en un parque. Al parecer los niños le tiraban piedras y un perro le había mordido. Del mordisco tenía una herida muy fea en uno de sus pies. La persona que lo rescató lo llevó al veterinario donde lo curaron y después de un tiempo de tratamiento pudo volver a caminar normal, aunque le ha quedado un agujero en la membrana del pie.
La persona que lo ha cuidado este tiempo contactó con el Santuario para que lo acogiéramos y podo antes de venir, se encontraron a Cleta. Desde entonces son muy amigos y nosotros contentos de que tenga una compañera.
Han estado los dos un par de semanas en cuarentena y en adaptación con los últimos patitos que llegaron. En los próximos días todos irán ya a vivir con el resto de patos y ocas del Santuario, como una gran familia feliz.