Jose, una voluntaria de Santuario Gaia, hace unos días llevó a su hijo a una granja de vacas lecheras para mostrarle la realidad que sufren las vacas y terneros al ser explotados por la leche. Esta es la conversación que tuvieron madre e hijo:
-¿Por qué chupa los barrotes mamá?
Porque está nervioso y muy asustado, está buscando a su mami, nada más nacer lo han metido aquí dentro, solito y lejos de ella. Ya no la volverá a ver cariño…
¿Oyes a su mami como llora? Estará así durante un tiempo, llamando a su bebé porque se lo han robado. Cuanto dolor cariño, no quiero ni pensarlo si me hubiera pasado a mi, si me hubieran robado a lo que más quiero en el mundo, a ti.
-¿Y qué pasará con él?
Cuando tenga unos 8 meses lo matarán para convertirlo en filetes de carne, pobrecito, y tan solo es un niño…
-¿Y a ella?
A su madre desde el día de hoy le sacarán la leche con unas máquinas, la leche que a este bebé pertenece, y se la darán a los humanos.
-¡¡ Pero si nosotros ya tomamos la nuestra mami ¡¡
Si cariño, pero los humanos se empeñan en hacer natural algo que es totalmente antinatural, porque cada madre de cada especie tiene el tipo de leche que a su bebé conviene. Además es tan cruel… por darnos un placer a nuestro paladar, a ellos se les hace pasar un calvario. Somos tan egoístas los humanos, hay quienes no lo saben, pero hay quienes sí, y aún así lo siguen haciendo. Menos mal que cada vez hay mas personas que empatizan y abren los ojos.
¿Sabes?, aún me acuerdo cuando te la daba a ti, era precioso ver como te alimentaba. Imagínate, te llevé dentro de mi, te sentía, te amé desde ese primer momento que lo supe. Y con ellos pasa exactamente lo mismo, sienten igual que nosotros, aunque muchos humanos no quieran aceptarlo… duele mucho la indiferencia, ya la irás conociendo mi amor.
Lucharemos por ellos ¿verdad cariño? Tú me ayudarás, estoy segura.