Así de felices viven los cerdos en Fundación Santuario Gaia, cerdos que iban a morir asesinados para servir como alimento a los humanos y que ahora viven en libertad sin ser explotados. A todos les encanta ir a pastar, cosa que en las granjas nunca pueden hacer, ni siquiera conocen la hierba, la luz del sol o darse un simple baño de barro.