Ayer fue un día muy triste en el Santuario, ya que por la mañana Guizmo nos dejó. No os podéis imaginar el vacío tan grande que ha dejado en todos nosotros. Llevaba más de un año con problemas de movilidad debido a una degeneración neurológica que le impedía mover sus extremidades. Comenzó teniendo problemas en sus piernas y luego también en sus extremidades delanteras. A pesar de realizarle todas las pruebas necesarias, nunca se llegó a un diagnóstico claro. Para ella, no moverse con normalidad, no suponía ningún problema y nosotros hemos hecho todo lo posible para que su vida fuera lo más confortable. Tenía una silla de ruedas con la que daba paseos toda la mañana y era la más feliz moviéndose con ella. Muchas veces nos la encontrábamos en el almacén comiendo el heno, toda contenta y nos sorprendía con que agilidad se manejaba con ella.
Estás última semanas comenzó a empeorar y su desmejoramiento era visible. Sabíamos que el pronóstico no era muy bueno, pero Guizmo tenía ganas de seguir luchando. Pero su cuerpo ya no ha aguantado y se ha ido sin dolor y en paz. Hace unos días hacíamos este directo donde aparecía Guizmo.
Siempre recordaremos su característico balido y cómo nos llamaba cuando nos veía, moviendo esas orejotas tan grandes y adorables.Era tan tierna y cariñosa, que todo el que la conocía se enamoraba de ella sin remedio.