Novita es un pato que llegó a Fundación Santuario Gaia hace poco más de 3 años, con pocos días de vida. Fue rescatado de una tienda de animales de Barcelona, donde lo tenían dentro de una pecera estresado, ya que los niños no paraban de tocarlo. El dependiente les contaba a los niños que con darle maíz bastaba y que podía vivir en un piso.
Esta historia es más común de lo que parece. En Fundación Santuario Gaia recibimos numerosas peticiones de familias que han comprado un patito cuando era pequeño, pero que luego no saben cuidarlo o no saben que hacer con él cuando crece. Tenemos que ser conscientes que cuando se acoge a un animal no es un juguete para regalar a los niños, ni mucho menos una “mercancía” de la que nos podemos deshacer cuando nos venga en gana. La venta de animales es un negocio muy cruel y debería estar totalmente prohibida. Son seres como nosotros, que sienten dolor, alegría, miedo o felicidad. Y esto no lo podemos olvidar.
Ahora Novita vive feliz con el resto de la familia de patos y ocas de Fundación Santuario Gaia, y le encanta ir volando todas las mañanas hasta un poste desde el que puede contemplar un vista maravillosa ?