Cuando Coque e Ismael López Dobarganes, los fundadores del Fundación Santuario Gaia, le han explicado a Javi que están haciendo todo lo que está en sus manos para ayudar a Patri, se puso a contestarles muy feliz.
Hay imágenes que valen más que mil palabras y esta fotografía es una de ellas. Javi se crio con ellos cuando era tan solo un bebé, vivía en la cabañita donde empezaron con el Santuario. Para él, Coque e Ismael son sus padres, y cuando los ve de lejos los llama muy feliz.
Ojalá el mundo los conociera de verdad, porque no son diferentes a nosotros; si hay alguna diferencia, es en la capacidad para amar que tienen ellos y que los humanos no tenemos.