Aunque ha pasado el tiempo la familia de Ramona sigue inseparable. Ellas tres, junto con Henar, han creado un vínculo que se mantendrá toda la vida, aunque Henar y Amalia no sean sus hijas biológicas. Es una de las historias más bonitas que hemos vivido en Fundación Santuario Gaia, ver como Ramona adoptaba a estas dos terneritas que la necesitaban
¿Y os habéis fijado como ha crecido Amalia? Siempre que la vemos recordamos lo pequeñita que llegó y ciega, y ahora es la ternera más feliz del mundo. En este vídeo podéis ver el rescate de Amalia en el Santuario: https://youtu.be/O4FJZPi-SWE