La semana pasada llegaban a Fundación Santuario Gaia 14 bebés pollitos, desgraciadamente 2 de ellos fallecieron los primeros días. Los demás están todos muy bien, aunque tenemos que tenerlos muy controlados y cuidados, porque son muy pequeños y no tienen madre. Cada poco hay que comprobar que hayan comido bien y mantenerlos a una temperatura adecuada, son tan delicados que si se ponen enfermos puede ser fatal.
Los encontraron en un parque en Barcelona, el mismo donde estaba Lolo y los bebés, que también llegaron al Santuario hace unos meses. No sabemos qué está pasando y por qué cada poco aparecen pollitos abandonados en este parque, corriendo todo tipo de peligros. Ahora están a salvo en el Santuario y cuidaremos de ellos como lo hubiese hecho su madre
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