¿Está o no está guapo Guillem después de pasar por el dentista? Resulta que uno de sus colmillos le había crecido tanto que casi se le clavaba en la cara. Para poder cortarlo lo sedamos un poco para que así estuviera tranquilo. Una vez que estuvo un poco dormido se lo cortamos con un hilo metálico que actúa como una sierra. Ha sido muy rápido y en menos de un minuto ya habíamos terminado. Guillem no se enteró de nada ni sintió dolor en ningún momento.
Guillem llegó a Fundación Santuario Gaia junto a Ramón, hace más de 5 años. Ambos son dos supervivientes de las inundaciones del río Ebro a su paso por Zaragoza que tuvieron lugar en 2015. Los encontraron en una acequia, exhaustos y muertos de miedo. Ellos tuvieron mucha suerte, ya que miles de cerdos murieron ahogados en las granjas, donde estaban encerrados sin poder escapar y a los que nadie ayudó.