Amalia nació ciega hace 5 meses. Por ese motivo no podían tenerla en la explotación donde estaba, ya que no podría seguir al resto de las vacas, así que nos avisaron para que la acogiéramos en Fundación Santuario Gaia.
Rápidamente fuimos a por ella y comenzamos un tratamiento para intentar curar las úlceras tan graves que tenía en los ojos. Fue un tratamiento muy largo, pero poco a poco vimos como mejoraba, hasta que llegó un momento que sus ojos se curaron por completo.
Durante todo este tiempo hemos sido su madre para ella, la hemos cuidado, alimentado y dado cariño. Pero ahora tiene otra madre, Ramona, que la ha adoptado y la trata igual que si fuera su hija natural, como hace con Zuriñe. Es muy bonito ver como las tres terneritas, Henar, Zuriñe y Amalia, han formado una familia, siempre bajo la atenta mirada y los cuidados de Ramona ?