Así comienzan las mañanas en Santuario Gaia ? Todos los días preparamos el desayuno de las ovejas y cabras dentro de su nave, pero para poder hacerlo mejor, las sacamos a todas fuera y cerramos las puertas. Ellas se quedan en el patio esperando a que esté listo, pero como podéis ver, son unas impacientes y no paran de pedirnos que abramos.
Si es que en realidad, no son muy diferentes de nosotros, y menos en relación a despertarnos con hambre. Y como testigo de excepción de todo lo que sucede está Pedro, esperando a que entren a desayunar y así podamos abrir el patio para que él y todas las vacas y toros vayan a los prados.
Pedro también tiene su rutina de pararse todos los días en la puerta de la nave para poder ver, a través de una rendija, a su amiga Olga con la que se crió.
En el Santuario viven más de 150 ovejas y cabras, todas rescatadas de situaciones de maltrato, explotación o abandono. Os podéis imaginar el gasto que tenemos con su comida. Por eso toda ayuda siempre es bienvenida ?