Hace unas horas hemos ayudado a Rosita a marcharse, y estamos con el corazón roto.
Rosita es una oveja que rescatamos al comienzo de la creación del Santuario. Había sido abandonada porque al ser mayor, ya no servía para tener más hijos que fueran enviados al matadero para ser alimento para los humanos, y por lo tanto, tampoco podía dar leche con la que hacer quesos.
Durante estos años ha sido una de las más mimadas, con atenciones especiales porque era una abuelita y no tenía dientes. Pero desde hace tres semanas su cuerpo ya dijo basta, debido a la avanzada edad. Las ovejas tienen una esperanza de vida de unos 15 años, pero al ser tan explotadas, sus cuerpos están muy desgastados.
El queso mata, por muy ecológico que sea, porque para que puedan dar leche, como también ocurre con las humanas, primero tienen que dar a luz. Los que nacen machos son enviados al matadero, aunque en fechas navideñas los envían a todos. Y en cuanto una oveja adulta deja de ser útil, es enviada al matadero y sustituida por una más joven.
Si de verdad quieres a Rosita y a los animales, hazte vegano.
DESCANSA EN PAZ PRECIOSA, UN DÍA NOS VOLVEREMOS A VER Y NOS ABRAZAREMOS