Ayer apareció esta cría de zorro en la puerta del Santuario sin poder moverse porque estaba muy enfermo. Tenía sarna, heridas por todo el cuerpo, deshidratado y lleno de larvas y garrapatas.
Le curamos y hospitalizamos en la enfermería con suero y medicación, pero no ha sobrevivido.
Nos emociona mucho lo que ha pasado porque no es la primera vez que un animal salvaje viene al Santuario a pedir ayuda cuando están mal. Ellos saben lo que aquí hacemos, tienen otra conciencia.JTNDaWZyYW1lJTIwd2lkdGglM0QlMjI1NjAlMjIlMjBoZWlnaHQlM0QlMjIzMTUlMjIlMjBzcmMlM0QlMjJodHRwcyUzQSUyRiUyRnd3dy55b3V0dWJlLmNvbSUyRmVtYmVkJTJGMFBId3ctd21WX1ElMjIlMjBmcmFtZWJvcmRlciUzRCUyMjAlMjIlMjBhbGxvdyUzRCUyMmF1dG9wbGF5JTNCJTIwZW5jcnlwdGVkLW1lZGlhJTIyJTIwYWxsb3dmdWxsc2NyZWVuJTNFJTNDJTJGaWZyYW1lJTNF
DESCANSA EN PAZ PEQUEÑO
