Hemos tenido que ayudar a Teodoro a irse. Después de estos meses luchando con su enfermedad, al final no ha podido más 💔
Teodoro llegó a finales de julio desde Córdoba. Lo habían encontrado en una carretera, atacado por un perro. También tenía la articulación del carpo izquierdo en muy mal estado, tanto que al poco de llegar tuvimos que amputar esa extremidad. Al hacerle la analítica de sangre confirmamos que tenía una enfermedad, la artritis encefalitis caprina, causante del daño en esa extremidad.
La cirugía fue muy bien, pero a pesar de todos los cuidados, Teodoro fue desarrollando artritis en otras articulaciones y un desmejoramiento general, cada vez más acusado.
Hasta que en la última semana ya era evidente que nos estaba dejando. Nosotros solo hemos tenido que ayudarle en el último momento para evitar sufrimientos innecesarios.
Sabíamos que era un caso muy difícil y que el pronóstico no era muy bueno, pero no por eso íbamos a dejar de darle la mejor vida posible, y creemos que estos meses han sido así.
No sabéis lo que le vamos a echar de menos. Ha sido uno de los habitantes más cuidados, mimados y queridos. A pesar de sus limitaciones, él siempre tenía una cara de felicidad que nos traspasaba el corazón, queriéndole aún más.
Nos deja un vacío muy grande, pero es solo físico, porque su recuerdo nos llenará siempre el corazón
