Esperanza es una de las 36 ovejas y corderos que llegaron a Santuario Gaia desde Navarrete (La Rioja) porque fueron abandonadas en una nave sin agua ni comida y donde murieron más de 140 ovejas. Esta mañana hemos hecho ecografías a las ovejas que sospechábamos que podían estar embarazadas y Esperanza y Alba son las que con seguridad van a ser madres. Nos hemos emocionado mucho al ver a sus bebés en el ecógrafo porque por fin van a vivir una maternidad diferente a la que han vivido cuando eran explotadas. En las granjas paren dos veces al año y sus crías son enviadas al matadero para consumo humano, un dolor que ellas no van a padecer en este ocasión porque vivirán toda su vida junto a sus hijos.
Queremos dar las gracias a las veterinarias Irati y Alba de la cínica Girbet de Camprodon por todo lo que nos ayudan, y por el amor que tratan a los habitantes del Santuario cuando los atienden. Están muy involucradas con el Santuario y eso nos emociona mucho. Han pasado toda la mañana en el Santuario extrayendo sangre a todas las ovejas y corderos para hacer analíticas.