Para nosotros Izadi dejó de ser una esclava el mismo día que la rescatamos de ir al matadero, pero hoy lo hemos hecho más visible quitándole su número de esclava.
Ya ha dejado de ser un número para convertirse en un ser con nombre e identidad propia, y ella ha sido consciente de ello, como podréis ver en el vídeo que publicaremos esta noche, con su reacción.
Ella fue explotada durante doce largos años, en los que era inseminada artificialmente para dar a luz un hijo que le robarían al nacer para ser enviado al matadero, y así no beberse la leche que iban a vender para el consumo de los humanos.
El crotal ha sido reemplazado por un chip, para que pueda seguir identificada de cata al Departamento de Ganadería.