Muchos y muchas nos preguntáis como está Valentí después de que su madre adoptiva Izadi muriera el pasado diciembre.
Los primeros días, como es normal y nos pasaría a cualquiera de nosotros, estaba muy triste y distante con todos, necesitaba pasar su tiempo de duelo.
Pero esta gran familia de vacas y toros que han sido rescatados de historias tan crueles, y que al llegar aquí han conocido el AMOR, iban detrás de él para no dejarlo solo y siempre estaban pendiente de él.
Ya sabéis que Ramona es una madraza y que además de tener a su hija Zuriñe, adoptó a Amalia y a Henar. Está tan llena de AMOR que ha cuidado tanto a Valentí durante este tiempo, que se ha convertido en uno de sus inseparables junto a sus tres hijas.
Nos emociona mucho estas lecciones de AMOR que nos dan los animales que viven en Fundación Santuario Gaia, y se que desde el cielo, Izadi está muy feliz viendo a su hijo cuidado por esta gran madre.
¿Nos ayudas a seguir salvando vidas?
Con tu ayuda salvamos vidas
Por un mundo vegano