En esta fotografía vemos a la pequeña Iris que todos conocéis, pero hoy os queremos hablar de la humana que le está dando el biberón, de Lia.
Muy pocas personas han pasado en estos años por el Santuario como ella, y por eso es nuestra obligación contarlo. Todos los que conocen a Lia, terminan por quererla con locura, porque es una persona entregadísima, con un corazón enorme. Es como una mamá que siempre está dispuesta a sacrificarse y a ayudar.
Esta gallega, nos tiene a todos conquistados. Gracias Lia por formar parte de Gaia.
Por un mundo vegano