Nos encanta esta fotografía de Liam porque transmite mucha paz y tranquilidad. Viéndolo así, parece que la vida de Liam siempre ha sido esta, pero por desgracia los primeros días de vida de Liam fueron un infierno. Nació con un problema que se llama “Splay leg” por el que no podía juntar sus piernas y no podía mantenerse de pie. Este síndrome es muy común en las granjas y lo que hicieron fue atarle los dos pies uno al otro para que no se separaran, con un alambre que se le fue incrustando en la carne hasta que le provocó una infección. Debido a esto se le necrosó el pie y lo perdió. Como ya no era productivo lo iban a matar de un golpe en la misma granja, cosa que no es nada rara que hagan. Por suerte una trabajadora se apiadó de él y nos aviso.
De todo esto hace ya más de un año y para Liam es como un mal sueño. Ahora es feliz junto a su amigo Miguelito y tiene toda una vida por delante de la que disfrutar.
