Simone es una mamá afortunada. Ella llegó en julio de 2020 junto a su hijo Goliath y junto a Zacarías desde Euskadi debido a un decomiso. Un mes después llegó su hija Henar – ella había fue robada poco tiempo después de que tuviera lugar el decomiso – tras el robo, pasaron varios meses separadas porque el decomiso fue meses antes de su llegada al Santuario.
Simone no hizo mucho caso a Henar cuando llegó así que decidimos darle una oportunidad a Ramona – que había parido a Zuriñe hace poco – para que pudiera cuidar de ella. Y así fue, Ramona adoptó a Henar y también a la ternera Amalia y los cuidó a las tres sin distinción. El pequeño Libero fue una gran sorpresa, cuando Simone llegó no sabíamos que estaba embarazada, estaba de muy poco tiempo, con lo que cuando de pronto un día nos encontramos al pequeño Libero junto a ella, en los prados, fue una gran sorpresa y muy emocionante para todos. No es la primera vez que las mamás de Fundación Santuario Gaia adoptan a otros bebés.