Ser vegano no es un estilo de vida o una moda. Ser vegano es una consideración moral, es extender el círculo de compasión (empatía) hacia los demás animales.
Somos compasivos con perros, gatos, ballenas, leones, elefantes, etc. Pero en cambio con los animales considerados de granja no lo somos, los vemos como un simple recurso, sin pensar que ellos también sufren y sienten dolor, tienen sentimientos y quieren vivir libres al igual que los animales humanos.
El veganismo no solo consiste en no comerse a los demás animales, sino en no participar en su explotación y muerte, como ocurre al consumir huevos, productos lácteos o miel. Por lo tanto, quien decide hacerse vegano deja de consumir productos que han sido testados en animales, deja de participar en espectáculos donde los utilizan como delfinarios, circos, zoos o la tauromaquia. deja de vestirse con prendas que lleven piel, lana o seda.
Hay otra manera de vivir sin dañar a ningún otro ser. Si muchos hemos podido hacer el cambio, tú también puedes.
UN MUNDO MEJOR PARA TODOS ES POSIBLE
Por un mundo vegano