Desde que Samuel era pequeño se acostumbró a dar el beso de buenas noches antes de irse a dormir. En el antiguo Santuario iba a la ventana de la casa donde vivían los fundadores para pedir y recibir su beso de buenas noches, y ahora lo hace con el que considera su hermano, con Pedro.
Esperemos que pronto terminamos el vallado para que Tina, la vaquilla de 7 meses que fue rescatada de una finca donde hacían capeas ilegales con ella, pueda estar junto a Samuel y Pedro, disfrutando de su compañía y sus mimos.
Dos seres que iban destinados al matadero, y que gracias a vuestra ayuda ahora viven felices en Santuario Gaia, disfrutando de sus vidas.
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